Reportajes de cine

Reportaje: «Robin Hood». Nacimiento de una leyenda

Ya sea por una bien acostumbrada infancia, plagada de films épicos de bajo presupuesto y gran calidad (en contraposición a las caras bazofias que nos cuelan actualmente),  o por la coincidencia en la pantalla de Russell Crowe y Cate Blanchett, a manos de Ridley Scott, sólo me cabe decir que esta nueva versión de Robin Hood promete.
 
Promete una interpretación magistral por parte de casi todo el reparto, un argumento complejo que ahonda en las relaciones humanas de sus personajes  y un excelente retrato de la Inglaterra del siglo XIII, dejando caer,  muy de tanto en tanto, alguna que otra batalla.
 
 
LAS VUELTAS QUE DA UN GUIÓN
 
Porque, gracias a las exigencias de Crowe y a las preferencias de Ridley Scott, el guión final poco tiene que ver con la idea inicial que planteaba un Robin Hood completamente diferente al héroe que conocemos.
 
Así pues, el comienzo del desarrollo de este film vino marcado por la obtención por parte de Universal Estudios, en 2007, de un guión llamado “Nottingham” que retrataba a Robin como a un villano, perseguido por el heroico Sheriff de Nottingham que rastreaba su pista al más puro estilo “CSI”.

No obstante, con la incorporación al equipo de un Russell Crowe descontento con el giro tan brusco que daba la trama, y apoyado por el propio director, que era partidario de acercarse a la leyenda clásica, la filmación se retrasó. 
 
Durante el año 2008 se volvió a escribir un guión en el que el actor daría vida al mismo tiempo al proscrito y al sheriff. Idea que fue descartada para unir posteriormente a ambos personajes en uno solo. 
 
Pero gracias a la huelga de guionistas, Scott tuvo tiempo de reflexionar y orientar el punto de vista de su nueva obra hacia una perspectiva más fiel a la historia tantas veces  representada en la historia del cine, con un guión a cargo de Brian Helgeland (“Payback”), Paul Web (“Lincoln”, proyecto pendiente de firmar por Steven Spielberg) y Tom Stoppard (“El Imperio del Sol”, “Shakespeare in Love”). Cambio que, de paso, permitió reducir el presupuesto del film, estableciéndose unos 100 millones de dólares, en contraste con los 160 iniciales.
 
 
 
NACIMIENTO DE UNA LEYENDA
 
La trama nos sitúa en Inglaterra, en pleno siglo XIII, con el rey Ricardo Corazón de León  (Danny Huston) volviendo de las Cruzadas, en cuyo trayecto de enfrenta a las tropas francesas. Tras encontrarse el monarca con uno de sus más nobles soldados, Longstride (Russell Crowe), éste es arrestado junto a algunos de sus hombres, no pudiendo defender a su rey de la muerte que le otorgan los  franceses. Cuando logran escapar, Longstride y sus hombres encuentran de camino a Inglaterra a un agonizante Sir Robin Loxley, encargado de llevar de vuelta a casa la corona de su rey fallecido, así como de entregar su espada a su padre, Sir Walter Loxley (Max von Sydow). 

  Longstride suplanta la personalidad de Loxley, dando lugar al origen de una leyenda: el proscrito Robin Hood. El hombre que se enfrentó a la recaudación de impuestos del nuevo monarca, John (así como a su forma de recaudarlos por medio del Sheriff de Nothingham), y a la corrupción de su mano derecha, Sir Godfrey.
 
Cabe destacar en este film, la disminución de atribuirle un carácter malvado al rey John,  quien, según el propio director “era una persona muy inteligente que recibió una mala reputación por presentar el sistema de impuestos”. 
 
 
 
RODAJE. DOS AÑOS DE PREPRODUCCIÓN.
 
En un principio, el inicio de la filmación fue previsto para Agosto de 2008, en el caso de que la huelga de guionistas que amenazaba con estallar ese mismo año no se llevara a cabo. 
 
No hubo suerte y el rodaje tuvo que retrasarse hasta Febrero de 2009, donde el equipo trabajó en los bosques de los alrededores de Londres, tras descubrir muchos árboles que no habían sido podados. 
 
En Junio y Julio se rodó en Freshwater West, Pembrokeshire, Gales, Ashridge State,  Little Gaddesden, así como en la frontera entre Hertfordshie y Buckinghamshire. La filmación también tuvo lugar en Bourne Wood (en Famhan), Surrey, y en Dovedale  (cerca de Ashbourne, Debyshire) en los meses de Julio y Agosto.

 

Se trató de un rodaje duro, que exigía una gran preparación, tanto en cuanto a forma física como a aproximación a los personajes, de modo que algunos de los componentes del reparto, como fue el caso de Russell Crowe, pasaron 10 meses leyendo libros sobre el personaje y su base histórica.  

La aspiración de Crowe siempre fue la de interpretar el mejor Robin Hood que se hubiese visto en la historia del cine. Así pues, tras haber ganado peso durante el film en el que participó en 2008, “Body of Lies”, Universal consideró mandar a un entrenador de la NBA a Australia para ponerlo en forma. El actor entrenó con un arco y una flecha durante cuatro meses hasta ser capaz de acertar en un blanco situado a una distancia de 45 metros.
 
El personaje de Eleanor de Aquitania, madre de los reyes Ricardo y John, iba a ser interpretada en un principio por Vanessa Redgrave, quien, tras la muerte de su hija, la actriz Natasha Richardson,  fue sustituida por Eileen Atkins.
 
 
 
LA QUIEBRA DE UNIVERSAL ESTUDIOS
 
Nos encontramos, pues, con un film épico basado en la supremacía de la narrativa y el guión sobre las grandes escenas bélicas a las que Hollywood tanto nos ha mal acostumbrado. 

  Y aunque podemos contar con tres batallas (la toma del castillo francés por los hombres del rey Ricardo, el ataque de Longstride y sus soldados a los hombres de Godfrey y una retardada batalla final), Universal hubiera preferido una obra más cercana al “Gladiator” que hizo ganar un oscar a Ridley Scott allá por el año 2000.
 
Y es que con un estudio vapuleado por la gran cantidad de fracasos económicos (“Hazme reír”, “El mundo de los perdidos”, “La sombra del poder”, “Green Zone”) que ha sufrido durante este último año, es comprensible que los deseos de la productora fuesen orientados a atraer a un público más juvenil (y masivo).
 
Quizá los cines no se plaguen de adolescentes que lanzan palomitas, pero puede que ésta sea de las pocas producciones en las que un espectador con un mínimo de mirada crítica no se sienta estafado.
 
Lo que dije. El film promete.

Marta C. Catalán

Foto, vídeo y gestión cultural. Aprendiendo a gestionar vías de escape al aburrimiento.

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