Análisis de Autopsy Simulator, diseccionando la mente y la carne

Gráficos
Sonido
Jugabilidad
Duración
Recomendable
Simulador de forense, realista e intenso. Divertido y sobre todo... único.
¡Bienvenidos a la morgue de Petesville, Luisiana!
Nos pone en la piel de Jack Hanman, un patólogo forense de mediana edad sumido en la depresión tras la muerte de su esposa Alice y que ve como su carrera está cayendo en picado. La historia, dividida en cinco capítulos que duran unas 7-10 horas en total, gira en torno a autopsias de casos sospechosos (muertes violentas, accidentes o crímenes) donde Jack encuentra pistas que conectan con su pasado, desencadenando alucinaciones y un misterio personal que explora temas como el duelo, la culpa y la cordura frágil.
Autopsy Simulator, desarrollado por el estudio polaco Woodland Games y publicado por Team17 y Astragon Entertainment GMBH, es un híbrido único entre simulador médico realista y terror psicológico que salió a la luz en Steam el 6 de junio de 2024, y que aterrizó en consolas (PS5 y Xbox SerieS/X) en abril de 2025. El 16 de octubre se lanzó la edición física para PS5 gracias a Meridiem y es, creemos, la mejor forma de hacerse con este curioso, sorprendente y atrevido título.

Vayamos por partes
Al grano: este no es un walking simulator genérico. Autopsy Simulator brilla por sus mecánicas de autopsia, consultadas con patólogos y forenses reales para una precisión anatómica escalofriante. Desde el mismo tutorial, que viene a ser el primer caso que investigas, ya percibes la pulcritud y exactitud que el equipo desarrollador ha realizado, así como todo el esfuerzo que han puesto por trasladar al juego lo que es una autopsia real.
Hay dos modos principales: el Modo Historia, lineal y narrativo, y el Modo Solo Autopsia (actualización gratuita que se lanzó en diciembre 2024), un simulador puro sin historia donde actúas como estudiante patólogo/forense con casos aleatorios y sistema de puntuación. Esto alarga la vida del juego y creemos que es donde se ve todo su potencial, si bien el Modo Historia nos ayuda a entrar en la mecánica que propone el título y le da un aliciente que seguro muchos jugadores agradecerán.
De la Historia no contaremos nada, ya que es interesante pero también corta y cualquier dato sería spoiler. Solo diremos que integra muy bien los casos que investigamos y que sabe mezclar todo ese ambiente médico/forense con una halo de misterio, incluso terror, potenciando la trama que rodea a Jack, su pasado y su frágil mente.

Mecánicas exhaustivas: el arte de abrir cuerpos
Las autopsias son el corazón del juego (siento la analogía pero no lo podía evitar), y se dividen en fases estrictas pero inmersivas. Todo se hace en primera persona, con controles intuitivos con los que fácilmente podemos desde hacer fotos a partes del cuerpo, abrir cráneos para extraer el cerebro o estudiar en la mesa las vísceras del difunto y sacar conclusiones (que los pulmones presentan color negruzco… tabaquismo, que los análisis de fluidos dan «tal» resultado… alcoholismo, etc, etc) y Jack narra cada paso como un tutorial eterno, lo que es abrumadoramente educativo. Y decimos bien: es hiper-interesante y en muchas ocasiones nos deja con la boca abierta por tanta información real, pero puede llegar a ser un poco/demasiado exhaustivo e intenso.

Un ejemplo de autopsia
Llegas al depósito. Primero, lees el expediente del caso: informes policiales, fotos del crimen, historial médico. Esto es clave para pistas contextuales (ej: hematoma sospechoso). Te vistes, te colocas los guantes de nitrilo y delantal y dejas a mano todo el material para no tener que perder el tiempo buscando cuando estés en faena.
Examen externo: Toma fotos del cuerpo entero y zonas específicas (pies, manos para huellas, heridas visibles como cicatrices o equimosis). Usa la cámara (herramienta dedicada) con mini-juego de encuadre preciso.
Inspecciona visualmente: busca tatuajes, moretones, rigor mortis o lividez cadavérica. Aquí ya notas gore opcional (borrador de desnudez viene por defecto, así que veremos las partes pudentas pixeladas).
Incisión y evidencias externas: Realizamos incisión en Y clásica: bisturí (scalpel) para cortar desde hombros al esternón y abdomen. Mini-juego de corte: mueve con el stick para trazar líneas rectas y ojo, que fallar causa cortes irregulares que bajan puntuación en el Modo Autopsia. Extrae muestras: hisopos de fluidos (boca, genitales), huellas dactilares con polvo y cinta adhesiva.
Apertura torácica y abdominal: Sierra ósea para abrir la caja torácica y aquí tenemos sonido crujiente realista que eriza la piel. Pinzas (forceps) y tijeras para extraer órganos uno a uno: corazón, pulmones, hígado, riñones, estómago, intestinos. Pesar y Fotografiar: Coloca en balanza digital (lee gramos), foto macro para anomalías (tumores, perforaciones).
Disección de órganos: Bisturí para abrirlos. Ej: corazón (corta aurículas/ventrículos buscando coágulos)… hígado (busca cirrosis o balas)… estómago (contenido para toxinas). Aquí tenemos más mini-juegos para realizar estas tareas: corte preciso, zoom para inspeccionar tejidos (texturas hiperdetalladas, venas pulsantes post-mortem).
Encuentras la causa: bala alojada, veneno (prueba toxicológica en máquina dedicada: inserta muestra, consulta libreta para poner tiempo y fuerza centrifugadora y espera resultados), asfixia (laringe hinchada).
Pruebas complementarias: Microscopio para tejidos, termómetro rectal para hora muerte, pruebas de sangre/orina. Integra con el expediente para confirmar (ej: alcohol en sangre + accidente).
Cierre y conclusión: Sutura, ¡que hay que volver a cerrar el cuerpo!: aguja e hilo en mini-juego rítmico, y hay distintos tipos de cosido. Limpia la mesa, guarda el cuerpo en una nevera. Dicta causa de la muerte al ordenador (en el Modo Historia esto es automático)
Y esto es el ejemplo de una autopsia. Como veis, muy minucioso y detallado, siempre acompañado por palabras y conceptos médicos que amplifican la sensación de realidad.

Modo Autopsia «libre», la diferencia
En este modo se randomiza: los cadáveres pueden apuntar a 8-10 causas posibles (ahogamiento, infarto, envenenamiento), por lo que debemos afinar mucho y ser muy cuidadosos y observadores. Con la práctica llegaremos a dominar el «arte» de descubrir las causas de la muerte. Cuando lleguemos a ese nivel obtendremos puntos por flujo (eficiencia de pasos), tiempo (rapidez), eficacia (cortes limpios), cosido (suturas perfectas). Las mejores técnicas y puntuaciones desbloquean medallas, incentivando con ello la repetición y las ganas de mejorar.
No tiene historia ninguna en este modo, así que es ideal para fans de los procedurales. Eso sí, recomendamos lanzarse a este modo solo después de jugar la Historia, ya que allí la dificultad sube gradualmente y nos permitirá ir entrenando para afrontar con más garantías los casos «sueltos».

Técnicamente notable
Gráficamente, el Unreal Engine luce órganos hiperrealistas (sangre viscosa, tejidos deformes), pero entornos y animaciones algo básicas que deslucen el resultado final. Se ha puesto todo el esfuerzo en recrear de manera contundente lo importante, dejando descuidadas otras cosas. Pero como lo que mueve este juego son las propias autopsias, ahí podemos afirmar que están logradas de sobra.
Es alucinante cuando sacas un cerebro y tienes que cortarlo por secciones para buscar derrames, coágulos o alguna anomalía. Como se comporta el órgano, gelatinoso y húmedo. Y lo mismo pasa con el resto de vísceras. Este nivel de detalle sumado a la magnífica documentación empleada para armar cada prueba, cada analítica, resultan en una experiencia que hay que probar. Es un juego único.
Los sonidos están igual de logrados, con efectos húmedos, huesos que crujen al romperse o ese silencio que lo imprega todo y amplifica el relato que de cada muestra nos cuenta Jack, con voz en off en inglés y subtítulos en perfecto español.

Conclusiones
Autopsy Simulator es un experimento fascinante para morbosos y curiosos: disecciona cuerpos con precisión clínica mientras tu mente se desmorona. Sus mecánicas son exhaustivas y auténticas, pero la guía opresiva y la repetición te pueden llegar a cansar. Su realismo quirúrgico educativo y su gore satisfactorio seguro que te enganchan y el Modo Historia también aporta un aliciente… pero en realidad es el entrenamiento necesario para disfrutar del simulador de forense más realista que existe.
No es apto para estómagos sensibles, ya que su nivel de detalle es importante. Los que alguna vez han sentido curiosidad por ese oficio que tantas veces hemos visto en películas, el típico forense que descubre hora y causas de la muerte, lo van a disfrutar mucho. Pero si te va la acción directa, quizá sea mejor apostar por otro… aunque sea un error.
Nosotros lo hemos pasado en grande y sobre todo valoramos la experiencia única que brinda, el poder sentirse como uno de estos médicos. Ya habrá tiempo para disparar a PNJ y abatirlos, aquí toca investigarlos después de muertos.
