Críticas de cómics

Crítica: «Usagi Yogimbo. Bunraku y otras historias», nueva etapa.

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Continúan las aventuras de Usagi, ahora en IDW y a todo color.

Valoración de los Usuarios 4.6 ( 1 votos)

Por fin llega hasta nosotros la nueva etapa de Usagi Yojimbo, acogido por la editorial IDW y renumerado, siendo pues un momento ideal para subirse a la serie. Para subrayar el cambio, se apuesta por un nuevo formato (tapa dura y mayor tamaño) además del detalle más importante y llamativo: el color. Más de 35 años de historietas protagonizadas por el conejo ronin, casi todas ellas en blanco y negro, quedan atrás. Las aventuras continúan, no se trata de un borrón y cuenta nueva, sino que seguimos las andanzas de nuestro protagonista donde quedaron en el tomo anterior… aunque el carácter cerrado de sus arcos argumentales permite que nuevos lectores puedan comenzar la serie desde este tomo sin ningún problema.

Usagi sigue su peregrinaje hacia el norte, donde cuestiones personales sin cerrar le esperan. Pero el camino es largo y todavía le quedan muchas aventuras por vivir antes de llegar. La primera de ellas es la historia en tres partes con la que se inicia este volumen, titulada Bunraku. Una compañía de marionetistas hace las delicias de nuestro protagonista y de todos aquellos que asisten a sus funciones. Sin embargo, encierran un oscuro y terrible secreto que tiene que ver con seres del más allá. Menos mal que Usagi no está solo y un antiguo personaje regresa a la serie para ayudarle: Sasuke, el cazador de demonios. Juntos se tendrán que emplear a fondo para acabar con la mortal amenaza.

La acción, lo sobrenatural y la aventura dejan paso a lo emotivo en la siguiente historia, dividida en dos partes, titulada El Héroe. En ella, la mujer de un samurai emprende viaje a casa de su padre. Por el camino conoce a Usagi y entablan amistad. Ella es Lady Mura y es una gran escritora cuyas novelas causan fascinación… y molestan a su marido, pues su posición de samurai está ahora devaluada debido a la paz que vive el país. Estar a la sombra del éxito de su mujer es vergonzoso para un samurai… y esto tendrá terribles consecuencias. Una maravilla de historia en la que Sakai demuestra que las tramas intensas en lo emocional se le dan incluso mejor que las de acción. Y al igual que en la anterior, aprovecha para introducirnos en la cultura del Japón de la época explicándola a través de matices y detalles.

Adachi es el título de la siguiente historia que no es sino una nueva adaptación del primer número de Usagi Yojimbo. Contada de manera distinta pero sin grandes cambios y con la misma fuerza que tenía hace más de 30 años, de hecho sirve para conmemorar el 35 aniversario de la serie. El tomo se cierra con el regreso de Gen, uno de los más queridos compañeros de Usagi. Junto a él viaja otro ronin, Perro Perdido, y los tres buscarán las espadas robadas de un señor para obtener la recompensa… y se llevarán una sorpresa.

Los 7 primeros números publicados por IDW conforman este volumen y demuestran que la serie no ha perdido nada con el cambio de editorial. La serie sigue enseñando a la vez que entreteniendo, equilibrando la acción y la fantasía con el humor y lo sentimental. Sus personajes tan irreales, antropomórficos y cercanos al dibujo animado, siguen teniendo una vida y una profundidad fuera de serie. Es, al fin y al cabo, el mismo cómic porque es el mismo autor.

Su narrativa, su dibujo fresco y suelto, personajes y mundo… todo sigue igual. A excepción de lo más evidente: el color. Tom Luth es el artista encargado de dar color por primera vez a la serie regular de Usagi Yojimbo. Le confiere un aspecto más actual al cómic, quizá más cercano para el público más joven… pero de momento se me hace raro como lector veterano de la serie. Son décadas leyendo estas historias en un blanco y negro limpio y pulcro, seña de personalidad tanto del autor como de su obra. Cientos y cientos de páginas y docenas de aventuras en las que hemos vivido todo tipo de historias, siempre con esa ausencia de color. Historias de samurais en blanco y negro, repletas de intensidad y de cariño… cuesta «cambiar el chip».

No sabemos si la decisión de incluir el color es imperativo de la nueva editorial, decisión libre del autor o si en algo influye la inminente serie de Netflix. Lo cierto es que la nueva versión cromática no termina de sumar al conjunto, al menos no termina de sumar de manera determinante. Lo mejor que se puede decir es que no molesta ni resta, no desmerece ni impide que sigamos disfrutando de este genial cómic. Nos terminaremos acostumbrando y no podemos decir nada negativo del trabajo en el color de Tom Luth. Sabe cumplir con su papel y mantenerse en segundo plano, sin tapar, desmejorar o disminuir el arte de Stan Sakai, auténtico protagonista siempre. Ese saber estar en su sitio por parte del colorista es doblemente elogiable.

Inmejorable debut de la serie bajo el sello IDW, rompiendo la continuidad anterior en lo estético (formato y color) pero manteniendo su misma esencia, su espíritu y su idiosincrasia. Sigue siendo un cómic único, ya casi un indispensable en cada temporada, una mirada que se mantiene sorprendentemente fresca al género samurai tras 35 años de vida. Yokais, batallas, tramas palaciegas, alianzas, amor, venganza… todos los elementos para una epopeya que sigue gestándose con cada entrega.

Terminamos confirmando que para esta nueva etapa se mantienen los acostumbrados prólogos escritos por profesionales enamorados de la obra. En esta ocasión la escribe Matt Alt, escritor y divulgador de la cultura japonesa. Si alguna vez habéis pensado en seguir esta serie, quizá sea vuestra oportunidad. Usagi sigue y, al mismo tiempo, se reinventa… su aspecto es más actual, pero se trata del mismo cómic de siempre. Uno de los grandes.

Giacco

Redactor jefe de las secciones de Cómics y Videojuegos, así como presentador de muchos de los programas de Hello Friki Podcast.

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