Críticas de videojuegosVideojuegos

Crítica de Curse of the Sea Rats, para Xbox Series S

Valoración

GRÁFICOS
SONIDO
JUGABILIDAD
DURACIÓN

Un divertido "ratoidvania"

Petoons Studio nos traen un buen metroidvania, con un buen hacer en lo referente a gráficos, al presentarnos personajes y escenarios dibujados a mano, haciendo de este título una genial experiencia para disfrutar solos o en compañía.

Valoración de los Usuarios Be the first one !

Un barco navega en la noche por las costas Irlandesas, transportando prisioneros para ser juzgados y ejecutados. De repente, la bruja pirata Flora Burn lanza un hechizo que hace que toda la tripulación sin excepción se transforme en rata.

Flora rapta al hijo del almirante aprovechando el caos ocasionado y se da a la fuga con varios secuaces. El almirante, roto y desesperado, decide prometer la libertad a aquellos que consigan traer de nuevo sano y salvo a su hijo.

¡Al abordaje!

Así arranca lo nuevo de Petoons Studio, la compañía que dio vida a Mi amiga Peppa Pig y otros títulos infantiles, cambiando el rumbo en esta ocasión para ofrecernos un metroidvania (ratoidvania según ellos) que gustará tanto a adultos como a aquellos niños que comienzan a buscar retos en sus partidas.

Meridiem Games se ha encargado de distribuir las ediciones físicas de este título, disponibles para PS4, PS5 y Nintendo Switch, aunque también se encuentran en versión digital para PC y Xbox Series X|S.

Tras arrancar el juego y visualizar la historia que hemos comentado al principio de esta crítica, aparecerán los cuatro protagonistas del título frente al almirante, el cual nos propondrá el trato de encontrar a su hijo a cambio de la libertad. Es entonces cuando podremos unirnos a la partida, seleccionando uno de los cuatro personajes disponibles, cada uno con sus habilidades propias.

Personajes.

Así, tendremos a:

  • David Douglas: Un colono americano del Ejército que se disponía a luchar contra el Imperio Británico. Rápido, provisto de una espada y una pistola con la que realizar ataques a distancia.
  • Búfalo Calf: Una cazadora cheyenne, condenada por soltar los caballos de un campamento británico. Dispone de dagas y la posibilidad de soltar cargas eléctricas a los enemigos, así como potentes hechizos.
  • Bussa: Presidente de la Isla de Barbados. Un esclavo fugitivo convertido en líder rebelde en su búsqueda por abolir la esclavitud. Grande y robusto, combina ganchos y cuchillo, con mucho aguante y devastadores ataques.
  • Akane Yamakawa: Una guerrera japonesa, ágil y acrobática, ataviada con una naginata para poner a raya a quien ose interponerse en su camino, así como algunas invocaciones que desatarán su furia.

Podremos jugar en solitario, o bien acompañados de hasta tres jugadores más simultáneamente en modo local, lo que puede hacer que la partida sea más divertida, ya que para un sólo jugador, puede volverse un poco difícil de primeras, al tener que ir adquiriendo habilidades y morir muchas veces para conseguir avanzar.

Díficil al principio, pero engancha…

Y es que el título no es sencillo a priori, ya que deberemos desplazarnos a través de un mapa no lineal, buscándonos la vida para avanzar por diferentes caminos e ir consiguiendo mejoras para el personaje, en aras de ser más poderosos para acabar con nuestros enemigos más fácilmente y poder seguir avanzando.

Nuestro personaje dispondrá de una barra de energía y otra que conseguiremos más adelante, con la cual podremos lanzar ataques especiales y hechizos, siempre que dispongamos de la energía suficiente para tal fin.

En un principio sólo dispondremos de nuestra arma principal y secundaria para defendernos, siendo un tanto débiles de cara a la multitud de peligros que deberemos afrontar a lo largo de más de 10 horas de juego con los que cuenta la historia; pero pronto nos aparecerá una especie de monje guardián en forma de espíritu, el cual nos contará la historia del medallón que llevaba Flora Burn, disponiendo de una de sus dos partes y ofreciéndonos potenciar diferentes habilidades, siempre que accedamos a alguna zona de control donde se encuentre y dispongamos de suficientes fondos de energía.

Mejorando nuestra rata.

Dispondremos pues de un árbol de habilidades, en el cual podremos ir desbloqueando diferentes mejoras, tanto a nivel de resistencia, como de salud o de potencia de ataques especiales y hechizos. Pero para realizar mejoras, deberemos buscar en cada una de las zonas del mapa del juego, el lugar donde se encuentre la aparición del «monje«. Esto hace que en muchas ocasiones debamos desandar camino en busca del punto de mejora y guardado de partida, pudiendo perder la energía en alguna zona muy avanzada y debiendo volver a aparecer desde el último punto de control…

Por otro lado, también iremos encontrando portales, que podremos activar si disponemos de suficientes fondos, facilitándonos los viajes entre sectores del mapa, con el fin de no tener que volver o ir de un punto a otro caminando, con el correspondiente peligro añadido de tener que lidiar de nuevo con diferentes enemigos que habíamos dejado atrás.

Dibujos animados jugables.

Curse of the Sea Rats se nos presenta en una perspectiva lateral en 2D, pudiendo mover a nuestro personaje, saltar, interactuar con diferentes objetos, acceder a zonas donde comprar consumibles y otros objetos que nos ayudarán en nuestra aventura, mezclando de este modo un juego de plataformas con ápices RPG, al poder ir mejorando a nuestro personaje de cara a afrontar nuevos retos con mayor seguridad.

A lo largo de nuestro camino nos encontraremos con diferentes enemigos, así como mini jefes y jefes finales que no dudarán en intentar hacer que lo pasemos mal para intentar derrotarlos, acabando en multitud de ocasiones con nosotros y debiendo estudiar bien sus patrones de movimiento si queremos salir victoriosos a sus arremetidas. Eliminando enemigos podremos conseguir vida, oro y otros objetos que nos irán muy bien para reponernos o mejorar algunos aspectos. También podremos encontrar cofres, con los que conseguiremos lo mismo que al acabar con nuestros enemigos, pero en ocasiones, en mayor cantidad.

Mucho que explorar.

Resumiendo, un gran mapa con múltiples caminos a nuestra disposición para explorar, conversaciones con algunos personajes y avances en la historia conforme nos vayamos enfrentando a los diferentes jefes finales que pondrán a prueba nuestra pericia. Todo esto aderezado con saltos, combates frenéticos y desbloqueo de habilidades para repartir cera a quien ose intentar entorpecer nuestra misión.

Como habréis visto por las imágenes que acompañan a este texto, el juego tiene un diseño exquisito, con personajes y escenarios dibujados a mano. Esto hace que nada más ponernos a jugar, el título nos entre por los ojos, al contar con unas animaciones impecables, tanto de los protagonistas, por su variedad de animaciones y movimientos, como de los enemigos, y sobre todo los jefes finales, muy bien trabajados y diseñados.

Los escenarios gozan de muy buena calidad, contando con alguna que otra animación que consigue dar vida al entorno en todo momento, haciéndonos sentir como si estuviéramos viendo un episodio de dibujos animados. Es muy loable la labor de diseño que Petoons Studio ha estado realizando para presentar este producto. En general, todo se ve precioso y bien animado en su conjunto.

Sonido.

A nivel sonoro, destacan las voces en inglés, con un doblaje muy profesional, del que destaca el buen hacer al poner a cada uno de los protagonistas el acento de la zona que vienen, dando ese toque de diferencia entre unos y otros.

La música no se queda atrás, con unos temas que nos transportan a aventuras piratas, con melodías tarareables y un fondo de melancolía en ocasiones, pero muy bien compuesta cada una de las piezas que conforman el título, dando fuerza a cada una de las situaciones y estancias por las que vayamos pasando.

A nivel de efectos, Curse of the Sea Rats, cuenta con buenos sonidos de golpes, disparos, explosiones y otros efectos de fuego, hechizos, etc. Rematando la experiencia global con muy buena calidad.

Conclusión.

Disfrutar del juego de un estudio español como Petoons Studio, me ha transportado por momentos a mi infancia, cuando diversas compañías españolas dominaban en cierto modo el mercado internacional de videojuegos, una época en la cual existían aquellos primeros ordenadores que conectábamos en televisores, cargando los juegos en cinta de casete, o cartuchos (en MSX). Me he transportado, no por el hecho de que el juego me recuerde a los juegos de antaño, si no por el hecho de pensar en la buena forma que han estado siempre nuestros desarrolladores patrios.

Tenéis un juego que os hará pasar unas buenas horas solos o en compañía, mientras disfrutáis de una genial aventura repleta de acción, humor y mucho arte en movimiento. ¿Os subís al barco, o tenéis miedo de convertiros en ratas?

Luis Martínez Semper

Amante de la lectura, escritor de poesía, novelista en proyecto... Tengo experiencia en reseñas literarias, así como en análisis y artículos sobre videojuegos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba