Reportajes de cine

La infantilización cinematográfica

En junio de 2020 HBO Max retiró temporalmente el clásico de Victor Fleming, Lo que el viento se llevó de 1939. Esta iniciativa la siguieron otras plataformas como Netflix, con Little Britain, y Disney + cuando restringió a los menores de siete años la visualización de  Dumbo de 1941, Peter Pan de 1953 y Los Aristogatos de 1970. Estas empresas ocultaron estos productos porque, aparentemente, emiten estereotipos racistas y machistas que atentan contra la igualdad y contra la inclusividad. Esto ha provocado que la opinión pública se polarice en dos frentes; el de las personas que defienden esa postura y el de los que tildan de ofendiditos a su contraparte. En ambos casos, el debate irradia dosis de toxicidad porque se deshumaniza al contrario con argumentos estériles y vejatorios.   

Estos sectores ofrecen discursos vacuos porque no se plantean una alternativa que pueda mezclar los puntos positivos de ambas partes. La solución más coherente sería, de un lado, contextualizar las películas clásicas, así como tener en cuenta la ambientación de los filmes más recientes y, de otro, añadir un rótulo introductorio que exponga el contenido que se va a proyectar. No se puede blanquear la Historia porque nuestras sociedades no son utópicas; existe el racismo, la homofobia, el machismo y la discriminación.

Orígenes.

Muchos consideran que la  pugna entre ambos sectores tuvo su génesis en 2019 cuando el medio de prensa insidethemagic.net escribió que se censuraría la escena de los cuervos en Dumbo porque uno de ellos se hacía llamar Jim Crow. Este nombre, que traducido al castellano sería Jim El Cuervo, tiene una connotación distintita en su idioma original pues hace referencia a las leyes Jim Crow que promulgaban la segregación racial en Estados Unidos. Estas estuvieron vigentes desde finales del XIX a mediados del XX.  La censura no se llevó a cabo, pero se alertó que el  filme contenía imágenes que podrían dañar la sensibilidad[1]. No obstante,  el primer recorte se produjo en los noventa con Los Rescatadores de 1977 porque en uno de los fotogramas se apreciaba a una mujer en topless. Este detalle pasó desapercibido en los reestrenos de 1983 y en el de 1989 porque no se lanzó en VHS hasta 1992. Los animadores se percataron de esta imagen cuando se habían vendido más de tres millones de copias. Finalmente, se eliminaron del mercado las cintas y en 1999 el filme salió al mercado otra vez, pero con esa figura reeditada[2].

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Los Rescatadores.

Este episodio aislado fue el precursor de numerosas reediciones y redoblajes que vulnerarían las obras originales.

Casos concretos.

En primer lugar cabe destacar El Perro de Flandes de 1975.  El estudio Nippon Animation produjo este anime que llegó al Estado español en 1977. Fue doblado en Barcelona ese mismo año, pero en 1991 fue redoblado en Madrid porque el final resultó traumático para el público infantil y se añadieron unas secuencias en las que la narradora edulcoraba la historia[3].

Por otro lado, en 2020 Disney censuró fragmentos de la película de 1984  Un, dos, tres Splash. La trama versaba sobre la historia de amor entre una sirena y un humano. En la cinta original, se muestran, si bien de forma disimulada, zonas desnudas del cuerpo de la protagonista. Este imperio de animación eliminó esos planos para evitar controversias[4].

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Un, dos, tres Splash.

En este sentido, también se han censurado expresiones mal sonantes que se han redoblado con otras voces. Para evitar la autocensura hubo series como Battlestar Galactica de 1978 en la que los personajes en lugar de decir “Fuck” decían “Frack”. Este esquema se continuó en su versión de 2004, pero no a modo de autocensura, sino para mantener vivo ese recuerdo.  Actualmente se hace para suprimir los exabruptos. Uno de estos ejemplos lo vemos en Aventuras en la gran ciudad de 1987 donde se han redoblado varias escenas entre las que cabe destacar el momento en el que la niñera se enfrenta a un ciudadano agresivo y exclama “Don’t fuck with the baby sitter” que se ha modificado por “Don’t fool with the baby sitter”. Lo mismo ocurre con la secuencia en la que el hermano mayor de la protagonista se refiere al dios Thor de Marvel “Homo”. Esto se cambió por “weirdo” porque se consideró que la primera versión podría incitar al odio.

Por último, Netflix decidió reducir la visualización de fumadores en sus proyectos para menores de catorce años alegando que el tabaco es perjudicial para la salud[5].

Riesgos de la censura bien intencionada.

Una serie que ha omitido la discriminación racial, y que atenta contra la realidad histórica, ha sido Bridgerton pues presenta a una pareja interracial londinense en 1813. Esto era impensable en el siglo XIX porque el Imperio británico fue una de las potencias hegemónicas que más condenó a los matrimonios mixtos. Lo mismo ocurrió con la película Come Away de 2020 en la que se presenta un matrimonio  interracial que tiene tres vástagos y que, a mediados del XIX, no sufre la estigmatización social.

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Come Away.

Afortunadamente,  no todas las series siguen esta tendencia. Por ejemplo, Watchmen de 2019 o la segunda temporada de Umbrella Academy (2019-) han hecho un buen tratamiento del problema racial porque reflejan el peso de las organizaciones supremacistas en Estados Unidos y explican el germen de los primeros núcleos de la resistencia del nacionalismo negro. Lo mismo ocurre con Lovecraft Country (2020-) que refleja la segregación racial en los años cincuenta.

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Umbrella Academy. segunda temporada.

Es un error eliminar estos componentes porque la lucha por los derechos civiles continúa. Esto se puede extrapolar a otros movimientos como el feminista porque si se presenta una realidad equitativa desde el Medievo, carecen de sentido las producciones que reflejan la lucha por la igualdad social. Un ejemplo ilustrativo de la violencia estructural contra la mujer aparece reflejada en Juego de Tronos (2011-2019) donde todos los personajes femeninos, ya sea en mayor o menor medida, sufren la brutalización de la violencia. Por este motivo, no se debe distorsionar la realidad porque entonces no podrían entenderse películas como Iron Jawed Angels de 2004 o Las Sufragistas de 2015 donde se reflejan las penurias, la violencia y la desigualdad que debían afrontar las mujeres antes de obtener el derecho al voto.  

Todo parece apuntar que este intento por censurar los episodios más cruentos de la Historia a través de los recursos cinematográficos, conducen a la infantilización de una sociedad cada vez más homogeneizada y gregaria a la que se la priva de juzgar con una mirada crítica dichos acontecimientos.


[1] Muscaro, TJ (2019, 17 de noviembre). «OpEd: The problem with censoring classic Disney movies on Disney+».insidethemagic.net.

[2] Jorge, Miguel (2016, 14 de mayo). «La mujer en topless que obligó a Disney a retirar millones de copias de Los Rescatadores». Gizmodo en Español.

[3] Daniel (2012, 31 de octubre). «El Perro de Flandes». Mis películas y series.

[4] Cazallas, Javier (2020, 16 de abril). «La absurda censura de Un, dos, tres, splash en Disney Plus tiene sus fans».HobbyConsolas.

[5] Albertini (2019, 8 de julio). «Netflix prohíbe el tabaco en sus nuevas series ante las críticas por su uso en ‘Stranger Things'». Espinof.

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