Resumen de la Crítica
Valoración
Crítica de la inolvidable película turca de los años 70.
Hace poco, publicamos dos Dossier Especiales en los que hablamos de los orígenes del Capitán América, desde su primera aparición en los cómics, hasta nuestros días. También pudimos conocer a sus aliados más fieles, El Halcón, Bucky Barnes (El Soldado de Invierno), sus terribles enemigos y algunos de sus amoríos. Pero las apariciones del Capitán no se limitan a los cómics. El Capitán América es más, mucho mucho más. Como las recientes películas tienen y tendrán varias reseñas, críticas y artículos, hoy quería traeros uno de esos productos extraños, diferentes y no me quedo corto al decir que incluso bizarro.
No hace falta más que leer el título de esta genialidad (ironía), ver que es una película de producción turca y que es del año ’73 para hacernos una idea de lo que nos espera.
Queridos lectores, agarraos al asiento porque esta maravillosa historia nos ubica en la ciudad de Estambul, Turquía, la cual se encuentra devastada y sumida en el caos dado que Spider-Man ha comenzado a matar a la población civil haciendo uso de sus superpoderes apoyado por su banda de lozanos matones con bigote, karatekas y demás calaña pintoresca. Rememorando la frase que le dijo su tío Ben y que aquí se pasa por el arco del triunfo “Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”, al parecer la gran responsabilidad del Hombre Araña en esta película es masacrar a los pobres turcos. No penséis que son golpes y bofetones sin más al estilo de la serie de Batman de los 60s, no, aquí veremos por ejemplo como Spider-Man y su banda están a punto de hacer picadillo la cabeza de una pobre mujer con la hélice de una barca, eso sí, previamente habiendo enterrado a la víctima, todo un detalle. Pero no queda aquí la cosa, ya que el “bueno” de Spidey al que simplemente llaman “Spider”, guiándose por los cánones de un asesino en serie, se dedica a entrar en las casas de los civiles para asesinarlos a sangre fría. Como veis, un auténtico psicópata. Ante esta desolación, un policía decide pedir ayuda a los Estados Unidos mediante una llamada telefónica solicitando la presencia de los dos “grandes” héroes del momento, El Capitán América y El Santo, icono popular de la cultura superheroica de México, para que restauren el orden en su país y acaben con la amenaza del malvado y todopoderoso arácnido. ¿Queréis más? Tranquilos, hay más.
Por cierto, el actor que tan brillantemente interpreta al Capitán América, también aparece en la comedia ‘Dünyayi’ (1982), otra joya.
A parte de ver a un Spider-Man sucio y malvado, cabe destacar su bajo estado de forma. No me andaré con rodeos, está gordo. Además seremos testigo de algunas de las escenas de acción y coreografías de peleas más lamentables que hayamos visionado en nuestras cortas vidas. Recuerdo con especial cariño una escena en la que el Capitán América está combatiendo al mal que asola a la vieja Constantinopla y de de repente se cuelga de una cuerda en el techo para hacer una acrobacia y golpear a los orondos rufianes. Es entrañable observar como el propio Capitán casi se queda atascado con sus propias piernas al intentar hacer una llave. Resulta curioso ver como los enemigos emiten unos extraños graznidos cuando son apresados o golpeados, aberraciones sonoras más típicas de un nazgul que de un ser humano. Así mismo, el vestuario está a la altura de lo que acabamos de comentar, con un nivel tan deleznable como dantesco. Sinceramente, he visto disfraces por 6 € en las tiendas chinas con una calidad infinitamente superior.
Veremos también escenas tan agradables como unas cobayas devorando los ojos de un personaje que ha fallado en su cometido. Como podéis ver, los turcos no se andan con tonterías, y al igual que en la época del destape que tan gloriosamente disfrutamos en nuestro país, aquí también hay tetas y culos, cabarets, semidesnudos y todo lo innecesario para que esta película sea todavía más disfrutable, si cabe, lo cual contrasta poderosamente con los atuendos de los mujeres turcas, ya sabéis, vestidos largos, velos, pelo tapado.
En fin, el director T. Fikret Uçak (nunca olvidaré ese nombre) creó este legendario crossover, que a pesar de ser una película absurda, incoherente, aburrida y en general mal hecha, os va a hacer reír y mucho, que en estos tiempos que corren, falta hace. Espero que la disfrutéis y os deje tan buen sabor de boca como me dejó a mí.
