Críticas de videojuegosVideojuegos

Análisis de Daemon X Machina: Titanic Scion, para Nintendo Switch 2. De los mechas a los exoesqueletos.

Valoración

GRÁFICOS
SONIDO
JUGABILIDAD
DURACIÓN

Un título recomendable

Daemon X Machina: Titanic Scion, es un título que consigue hacernos disfrutar de una buena experiencia jugable, sin llegar a ser un título top, pero muy recomendable si nos gustan los combates entre robots y la personalización de nuestro arsenal de combate.

Valoración de los Usuarios Be the first one !

Cada día resulta más complicado abarcar el aluvión de novedades que se van dando para las diversas plataformas jugables actuales.

Desde finales de agosto y esta escasa semana de septiembre que hemos pasado, hemos tenido multitud de lanzamientos, algunos de los cuales os iremos desgranando en próximos análisis.

Mientras hay algunas compañías ancladas a su pasado, empeñadas en traernos refritos de viejas glorias, las cuales estoy seguro de que no podrán volver a emular de nuevo, otras compañías trabajan por traernos novedades, con mayor o menor suerte, pero intentando apostar por nuevos productos…

Un regreso repleto de nuevas ideas.

Hoy os traemos un título, del cual su primera entrega llegó únicamente para Nintendo Switch y posteriormente Windows en 2019. Os hablamos de Daemon X Machina: Titanic Scion, desarrollado por First Studio y distribuido por Marvelous Games, un juego que tenéis disponible desde el pasado 5 de septiembre para Nintendo Switch 2, Xbox Series X|S, PS5 y Windows.

Si bien en la primera entrega de este título todo se centraba en manejar mechas gigantes, en Daemon X Machina: Titanic Scion se ha apostado más por el manejo de exoesqueletos, aunque en la práctica tiene bastante similitud, como veréis en líneas posteriores.

La historia del juego nos mete de lleno unos años después de lo sucedido en la primera entrega, pero no os preocupéis, ya que no hace falta saber nada de la misma, pues la línea argumental de esta es bastante independiente.

Una guerra con un vencedor.

El hecho es que ha habido una guerra entre dos planetas, con una duración de muchos años. En un momento dado, se firma una tregua y un pacto para no atacarse entre ellos. Pero han habido secuelas en ambos bandos, ya que el uso de una energía denominada Femto, ha hecho que una facción haya mutado, desarrollando la habilidad de pilotar unos exoesqueletos llamados Arsenales.

Estos pilotos de exoesqueletos son tratados como no humanos y denominados Outers. Pero gracias a su poder se impusieron, formando un régimen militar: Axiom, y teniendo como objetivo erradicar a los humanos.

Los humanos están intentando hacer frente a los Outers, formando grupos de asalto denominados Reclaimers. Y es en este punto donde comenzamos nuestra aventura, ya que despertaremos en una sala, siendo uno de los Outers, aunque pronto dejaremos de formar parte de este grupo, pues están a punto de convertirnos en un soldado sin voluntad, siendo salvados en el último momento por Nerve, otro soldado que nos explica esta situación y nos ayuda a escapar, sacrificándose por nosotros en los primeros compases del juego.

Personalización.

Antes de todo esto, podremos personalizar nuestro personaje, eligiendo sexo y tipo de cara, pelo, cuerpo, etc. Acabando, tras diversos enfrentamientos iniciales, por caer a la Tierra y unirnos al grupo de los Reclaimers, con el fin de acabar con Axiom y todo lo que controlan.

Hay que tener en cuenta además que en la Tierra, debido a la energía que nutre a los Outers, existen mutaciones en los seres vivos, convirtiendo a muchos de ellos en seres monstruosos, denominados Inmortals. Contra este tipo de seres deberemos enfrentarnos en multitud de ocasiones durante nuestra aventura.

Daemon X Machina: Titanic Scion se nos presenta con una visión en tercera persona, controlando a nuestro personaje a través de mundo abierto, con el objetivo de ir realizando misiones principales y secundarias, algunas indicadas dentro del arco argumental y otras pudiendo ser seleccionadas desde nuestra base principal.

Pasito a pasito.

En un primer momento podemos quedar un poco abrumados, pues no se nos explica el modus operandi ni de los combates ni de como equiparnos con armas y partes de nuestro esqueleto, pero pronto iremos cogiendo un poco el punto y disfrutando de una experiencia divertida e interesante.

Cuando salimos a explorar nos enfundamos en nuestro exoesqueleto, pudiendo ir a un punto fijado de misión o desplazarnos descubriendo la zona por la que nos encontremos. De este modo, y aunque las zonas están poco habitadas en su mayoría, nos podremos topar con diferentes enemigos, algunos de los cuales serán mecánicos y otros más monstruosos.

Cuando combatimos, disfrutaremos de una dinámica bastante rápida y divertida. Por un lado podremos movernos rápido con impulsos de nuestros propulsores, con el fin de esquivar o llegar antes al enemigo. Luego, dependiendo del arma principal y secundaria que tengamos, se nos permitirá realizar ataques a distancia y cuerpo a cuerpo, contando a lo largo de la partida con diversas armas de fuego, espadas, puños, etc.

Aparte, conforme avancemos, podremos conseguir armas arrojadizas, secundarias para realizar cambios directos de armamento o bien realizar diversas acciones, tales como arrancar corazas de protección de los enemigos para dejar a nuestra merced puntos débiles, o bien choques de armas, entre otras.

Luchas titánicas.

Lo más espectacular es el hecho de enfrentarnos a los grandes jefes de cada misión, aquí deberemos ir buscando sus puntos débiles, a la par que intentamos acercarnos y arrancar partes de sus armaduras para poder hacerles un daño mayor. Estos combates son bastante entretenidos, consiguiendo momentos fantásticos por la magnitud de los enemigos que se presentan, así como sus movimientos a la hora de atacarnos.

Hay que tener en cuenta que cuando acabamos con un enemigo, podremos inspeccionarlo en busca de armas u otros objetos, pero de todo lo que disponga, únicamente podremos seleccionar una única cosa, ya sea arma, armadura, créditos, etc. Esto nos limita un poco, pero hace interesante nuestro avance y elección en todo momento.

Por los diversos escenarios que podremos encontrar en Daemon X Machina: Titanic Scion, nos podremos desplazar caminando o volando, pero a parte, habrá momentos en los cuales se nos permitirá conducir un coche, una moto o un caballo, entre otros. Por otro lado, el título combina muy bien momentos de exploración con escenas en las cuales vamos montados en un vehículo, disparando a enemigos como si estuviéramos en un arcade matamarcianos, entre otras sorpresas.

Misiones y sub-misiones.

El planteamiento general del juego es sencillo, y aunque en un principio parezca complejo, pronto entenderemos toda la mecánica, basada en ir cumpliendo misiones y mejorando nuestro exoesqueleto, con el fin de ser más poderosos de cara a un nuevo enfrentamiento. Esto se traduce en subidas de nivel que nos permitirán disponer de nuevos módulos, con los cuales soportaremos mayor energía para acoplar armas que consuman más de la misma.

El arsenal es bastante amplio, tanto a nivel de armadura como de armas, pudiendo personalizar las mismas a nuestro gusto, siempre dependiendo de la capacidad que dispongamos. Aparte, al acabar con un enemigo de los grandes, conseguiremos una especie de simbiosis entre su cuerpo y nuestro cuerpo, dándonos de este modo la posibilidad de acudir a nuestra base y sintetizar diferentes elementos para tener una nueva mejora en nuestro personaje, con libertad para trastear y sacar punta a estas fusiones. Pero hay que tener en cuenta que, cuando más simbiosis carguemos a nuestro personaje, este irá perdiendo personalidad humana, quedando en nuestras manos su destino.

La verdad es que podríamos pasarnos líneas y líneas hablando únicamente de la personalización de nuestro exoesqueleto, pero lo mejor es que se experimente personalmente, pues hay opciones para aburrir, lo cual nos hará disfrutar cada vez de nuevas opciones.

Básicamente esto es todo lo que vamos a encontrarnos en el juego, que no es poco, pero aparte dispondremos de un modo cooperativo, así como la posibilidad de acceder a un estadio, donde combatir contra otros exorobots, midiendo nuestras fuerzas y disfrutando de endiablados combates.

Gráficos y sonido.

A nivel gráfico, el título se mueve con Unreal Engine 5, ofreciéndonos un entorno y unos gráficos que, sin llegar a ser espectaculares, consiguen hacernos disfrutar de una buena calidad a nivel global. En Nintendo Switch 2 todo se ve bastante fluido a lo largo del juego, pero hay que reconocer que es en Xbox donde mejor se puede disfrutar de este título.

Las animaciones dotan a los combates de rapidez de movimientos y buena respuesta en general a los mandos, haciéndonos disfrutar en todo momento de una buena experiencia. Pero también hay que tener en cuenta que la cámara puede llegar a marearnos por momentos, desubicándonos un poco en ocasiones al no localizar un enemigo a diferente altura, o bien perder de vista a alguien que nos ataca por un lateral. Este es un punto más flojo en su ejecución, aunque si nos dejamos llevar un poco por lo frenético de los combates, al final acabaremos acostumbrándonos.

Las secuencias animadas gozan también de buena calidad en su conjunto, presentando escenas que nos introducen en cada arco argumental de una manera bastante interesante, realizando un fundido correcto con la acción a realizar en cada momento.

Hay que reconocer también que hay algunos escenarios que pueden resultar un poco vacíos y repetitivos en alguna ocasión, pero en general, todo queda compensado con variedad de situaciones que mezclan conducción, con disparos y combates, aparte de la exploración, haciendo que no resulte aburrido en su conjunto.

Sonido.

Pasando al apartado sonoro, disfrutaremos de una banda sonora genial, muy acorde con las acciones que iremos encontrando a lo largo de la historia. Así, podremos encontrarnos con melodías que mezclan guitarra y percusión para ofrecernos momentos épicos en combate, así como otros momentos en los cuales tendremos una instrumentación más ambiental y futurista, mientras exploramos diferentes localizaciones. Aparte, podremos escuchar las voces de los personajes tanto en inglés como en japonés, con subtítulos en castellano.

Conclusión.

Personalmente considero que Daemon X Machina: Titanic Scion es un título bastante bueno a nivel general, ofreciéndonos exploración, acción y situaciones diversas, con ingredientes de sobra para hacernos disfrutar de horas de diversión.

Si que es cierto que no es un juego sublime, pues tiene sus pequeños defectos a nivel de cámara, aparte de que al jugador le tiene que gustar el tema de combates entre robots. Pero aún así, la sensación que deja al final es de un juego realizado con mimo, intentando ofrecer al jugador una experiencia divertida.

A nivel general mejora ampliamente a su predecesor, ofreciendo nuevos planteamientos, así como ideas muy interesantes, sobre todo a nivel de personalización de nuestro exorobot. Por otro lado, y teniendo en cuenta lo que está pasando ahora con el tema de las Gamekeys en Nintendo Switch 2, es de agradecer que se haya apostado por traernos el juego completo en un cartucho, lo cual es bueno que se tenga en cuenta a la hora de apoyar a quienes actúan de este modo hoy en día.

Por todo lo descrito, os aconsejo darle una oportunidad a Daemon X Machina: Titanic Scion, pues es una propuesta que cumple con el objetivo de hacernos disfrutar de un buen título, sin ser sobresaliente, pero dejando buen sabor de boca.

¿Os atrevéis a plantar cara a Axiom? Cuidado con las simbiosis…

Luis Martínez Semper

Amante de la lectura, escritor de poesía, novelista en proyecto... Tengo experiencia en reseñas literarias, así como en análisis y artículos sobre videojuegos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba