Críticas de cómics

Crítica: «Batman: Alegría», aprendiz y maestro

General
Guión
Dibujo
Personajes
Historia
Edición

Recomendable

Una buena historia, sin pasarse, donde Batman y su antiguo pupilo se reencuentran

Valoración de los Usuarios Be the first one !

«Alegría» no es un subtítulo muy adecuado para una aventura de Batman. Un héroe tan taciturno y serio parece no encajar con semejante acepción. Pero todo tiene explicación, ya que hace referencia a una nueva droga, las Lágrimas de Alegría, que está haciendo estragos en las calles de Gotham.

Esta sustancia llena de felicidad a quien la consume a tal nivel que se vuelven adictos y pronto caen víctimas de la sobredosis. Hay que ponerle remedio y para ello tenemos a nuestro héroe, el Caballero Oscuro. Sin embargo alguien se le va a adelantar: Capucha Roja empatiza con el hijo de una víctima de esta droga y toma su erradicación como algo personal. Pero los métodos de Capucha Roja son demasiado expeditivos y Batman tendrá que entrar en acción para evitar excesos.

Se establece entonces un juego de alianzas forzadas, de conflictos en los métodos, de relación al fin y a cabo entre el maestro y el que una vez fue alumno, Jason Todd, antiguo Robin. Además, se profundiza al mismo tiempo en ese sentimiento de culpa que siente Batman pues, recordemos, este fue el Robin de Una Muerte en la Familia… aunque las muertes, en esto de los cómics, nunca es definitiva.

Chip Zdarsky escribe así una aventura típica dentro del historial de Batman a la que imbuye de un interesante aliciente al mezclar esos temas «familiares», el sentimiento de culpa por un lado y cierto rencor por otro. La evolución de los personajes pasa a un segundo plano en favor de la evolución que muestra la relación entre ambos. Porque de eso va de verdad esta miniserie de seis números compilada en un solo tomo por ECC Ediciones. El antiguo alumno ha seguido su camino, pero quedan asuntos pendiente que solucionar… y a veces esos asuntos incluyen el perdón, la disculpa, la reconciliación.

Tales componentes serían difíciles de encajar en una historia de Batman si no se camuflaran a través de una aventura de acción. Por eso la habilidad del guionista es remarcable, porque consigue trasmitir todo eso mientras asistimos a combates, investigación y acción… y a la aparición de villanos de toda la vida. No falta de nada en esta miniserie que se lee con agrado y, sin ser algo excepcional, está a la altura de lo que se espera de Batman.

Contribuye al buen resultado final el arte de Eddy Barrows que acepta las «reglas del juego» que marca un cómic de superhéroes, llenando las páginas de poses y peleas, luciéndose con viñetas grandes o escenas dinámicas… alternándolas con otras escenas introspectivas, más pausadas, pero siempre manteniendo ese estilo estilizado y vistoso tan propio del medio.

Una buena lectura que no defraudará a los seguidores de Batman y que logra algo no tan habitual en este tipo de publicaciones: enriquecer las relaciones de la Bat-familia, haciéndolas evolucionar y atreviéndose a enfrentar a estos personajes con sus fantasmas pasados.

Batman y Capucha Roja nunca han hecho tan buen tándem, ni cuando el segundo era Robin.

Giacco

Redactor jefe de las secciones de Cómics y Videojuegos, así como presentador de muchos de los programas de Hello Friki Podcast.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba